Blogia
mnez

AZB XIII

Me encontré un día tan perdido, tan angustiado, tan impotente, tan derrotado que se me ocurrió aliarme con Lucifer y así, con las mieles del pacto, libar al menos por un momento el triunfo y el descanso. Al preparar mi dote de compromiso nada pude ofrecer a mi marchante; y ni el mismo demonio aceptó el trato

1 comentario

Julio -

Pues si Lucifer no te quiere para su infierno, eso es que estás destinado para el cielo. Santo, tal vez.

Un abrazo